Estamos inundados de estímulos, todos los días desde que nos levantamos hasta que apagamos las luces para dormir. A tal grado que yo misma he soñado con una mezcla de cosas que son mías pero también impuestas por la cultura occidental en la que vivimos.

Cada día tiene su pensamiento recurrente, y según un estudio realizado por Harvard, pasamos el 47% de nuestro tiempo divagando en pensamientos, por lo general del futuro o el pasado y preocupaciones diarias; nunca pensamos en el presente.

Es impresionante la importancia que le damos a pensamientos que casi siempre son sólo ideas de algo que puede llegar a pasar o que si ya pasó nos castigamos con lo que pudimos haber hecho mejor aquella vez (hace un día, tres semanas, seis meses, o hasta algo que pasó hace 4 años.) Estamos saturados de preocupaciones y por lo tanto estrés, lo que significa que nuestro sistema nervioso ya comenzó a gobernar tanto nuestro cuerpo como nuestra mente y cuando esto sucede nos bloqueamos y el flujo de información dentro de nuestro cerebro se vuelve más y más lenta.

En un video creado por UpLift  se explica cómo el yoga y la meditación ayudan a que este flujo de información sea mejor y que el cerebro se desbloquee, por así decirlo, y por consecuencia que las ideas creativas se den mas fácilmente, así como pensar de manera positiva y clara.   

Me pongo a pensar y esto tiene mucho sentido; el yoga y la meditación realmente te ayudan a cambiar la manera en la que ves al mundo. Si tu cuerpo se siente bien y tu mente está en calma, sin estrés, claro que vas a pensar de manera más positiva, en lugar de preocuparte todo el tiempo podrás disfrutar de las pequeñas cosas de tu presente. Esto lo dicen las antiguas filosofías de Oriente.

Ellos dicen que los chakras dentro de nuestro cuerpo (que son centros de energía en distintos puntos del cuerpo humano), se puede llegar a conectar con ellos sólo “silenciando a la mente” y que cuando hay menos resistencia se transporta mejor la energía. El estrés, por ejemplo, crea resistencia pero la calma te ayuda a crear consciencia de tus chakras y así poder alinear y coordinar la energía de cada chakra en tu cuerpo, todo esto por medio del prana, osea la respiración. Esto lo vemos perfectamente en la meditación que se basa en la respiración y en el Yoga Iyengar que se basa en la alineación del cuerpo y la respiración.

Meditar te ayuda a estar consciente de ti mismo, y con solo 10 minutos al día puedes empezar a ver las diferencias que lo único que hacen son beneficiarte. Yo he puesto esta teoría a prueba durante ya unos años y siempre que me siento ansiosa por algo, me doy un tiempo para meditar y he notado que cuando regreso a hacer mis tareas del día me siento despejada y tranquila conmigo misma, que es lo más importante.

Para los que aman pintar o trabajan en algo que involucra mucha creatividad, de verdad recomiendo mucho que se sienten un rato a meditar. ¡Que nos les de miedo! Simplemente siéntense en una postura cómoda y respiren haciendo consciente su respiración y el movimiento de su cuerpo, si hay un pensamiento o sensación recurrente no se enganchen y obsérvenlo. La meditación los ayudará a que poco a poco conecten más con esa parte que a veces nos cuesta trabajo soltar, nuestro yo, lo más profundo de nuestro ser.